Estas galletas de jengibre sin gluten están hechas con harina de quinoa. ¡Son crujientes por fuera, masticables por dentro y absolutamente deliciosos!


Ingredientes

  • tazas de harina de quinua
  • cucharaditas de bicarbonato de sodio
  • cucharaditas de canela molida
  • cucharadita de clavo molido
  • ½ cucharadita de jengibre molido
  • ½ cucharadita de sal marina
  • ⅓ taza de jengibre cristalizado , picado en trozos pequeños
  • ½ taza de aceite de coco , en estado líquido
  • taza de azúcar morena clara empaquetada
  • cucharada de huevo de lino
  • ¼ taza de melaza
  • ¼ de taza de azúcar de caña , para rebozar

Instrucciones
 

1. Precaliente el horno a 350° F.

2. Bate la linaza con agua en un tazón pequeño para hacer un huevo de linaza. Dejar de lado.

3. En un tazón mediano, mezcle los ingredientes secos (harina de quinua, bicarbonato de sodio, canela, clavo, jengibre y sal marina). Dejar de lado.

4. Usando una batidora eléctrica equipada con el accesorio de paleta, bata el azúcar moreno y el aceite de coco hasta que esté cremoso, aproximadamente 2 minutos. Batir la melaza y el huevo de linaza hasta que se mezclen.

5. Con la batidora baja, agregue gradualmente la mezcla de harina, batiendo hasta que se incorpore. Agregue trozos de jengibre cristalizado y mezcle por última vez.

6. Usando las manos, enrolle la masa en bolas de 3/4-1 pulgada. Coloque el azúcar en un tazón poco profundo y enrolle cada bola de masa en el azúcar para cubrir. Transfiera las galletas a bandejas para hornear preparadas, espaciando uniformemente.

7. Hornee durante 12-15 minutos o hasta que esté dorado oscuro e hinchado, girando la bandeja para hornear a la mitad de la cocción. Retire del horno y use la parte posterior de un tenedor para presionar suavemente en el centro de cada galleta para hacer una forma de galleta más plana.

8. Déjelos enfriar un poco antes de transferirlos a una rejilla para que se enfríen por completo. ¡Disfruta!